Colgante metálico con cabeza de ciervo en alto relieve
Dimensiones: 2,1 cm de ancho x 3,5 cm de alto
Acabado envejecido que resalta texturas y volumen
Incluye cadena metálica trenzada de 60 cm
El ciervo no ruge. No huye. Solo observa.
En la cima del Yggdrasil, el árbol que conecta los nueve mundos, habita Eikþyrnir, el ciervo silencioso. No es cazador, ni presa. Es testigo. Sus astas captan la energía cósmica y la convierten en las aguas que fluyen hacia todos los reinos: los ríos que nutren Midgard, los manantiales de sabiduría de los dioses, el poder que no se ve pero sostiene el universo.
Forjado como símbolo de movimiento silencioso, para quienes avanzan sin hacer ruido, pero con dirección clara. Está inspirado en ese ciervo sagrado, canalizando propósito, observación y poder que no necesita permiso.
Portarlo es más que vestir un colgante: es llevar un recordatorio de lo invisible que guía lo visible. Una declaración de energía sin ego.
Edición limitada: Solo 100 unidades disponibles. Perteneciente a la colección "Guardianes del Yggdrasil".
Fabricación: Ensamblado a mano. Cada unidad presenta ligeras variaciones de textura únicas.
Cuidado: No requiere mantenimiento. Evitar contacto con productos abrasivos.